Aunque el día de San Valentín sea una fiesta sin duda comercial, podemos aprovechar este día para realizar en familia actividades que involucren a los niños y se den muestras de cariño a toda la familia.
Hacer un spa casero con baño con espuma y velas, una cena en la cama viendo todos juntos la película favorita de los peques, entregándose tarjetas hechas en casa unos a otros… A los niños les hará salir de su rutina por un día y estamos seguros que les encantará. ¿Qué os parece?
Vía: Bebés y más