En Primera Foto creemos que los colores no tienen género aunque la moda y las recientes creencias nos han ido inculcado que el color rosa es para las niñas y el azul para los niños. Pero con todas las posibilidades que nos da el espectro cromático ¿por qué quedarnos con tan solo dos colores?
Y no es que no nos gusten las niñas vestidas de rosa y los niños de azul ¡Nos encantan! Es más, creamos ambientes mágicos a su alrededor al momento de fotografiarlos. Pero también hay cada vez más padres que quieren alejarse de estos estereotipos y nosotros les ofrecemos diversas propuestas que incluyen colores fuertes y ácidos si es necesario.
Historia de dos colores
La revista Earnshaw’s Infants’ Department publicó en 1918 un artículo en el que se leía: “La regla generalmente aceptada es rosa para los chicos y azul para las chicas”. Así fue como nos enteramos de un dato curioso y sorprendente: en un principio se recomendaba vestir a los niños de color rosa por ser una gama de rojo, un color que se asocia con fortaleza. Y a las niñas con azul por denotar delicadeza. Lo que queda en evidencia es que no hay una justificación ancestral o psicológica para que se le asigne a un sexo un color u otro. Todo obedece a estrategias del mercado y de la misma publicidad.
Moda sin género
Algunas marcas de ropa infantil han empezado a desmarcarse de la tendencia de poner género a los colores y han sacado al mercado prendas unisex para niños. En sus colecciones predominan colores diversos y los diseños pueden ser lucidos tanto por niñas como por niños. Un ejemplo de esto es la marca Bla, que define así su colección: «…un concepto unisex que reivindica el papel de los niños como tales (sin barreras, sin prejuicios, libres y creativos)». Ya son varias las empresas tanto españolas como extranjeras las que han empezado a caminar bajo ese concepto. En este artículo puedes encontrar información al respecto.