¿Quisieras hacerte una fotos bajo el agua este verano y no sabes cómo? En esta entrada te vamos a enseñar cómo puedes hacerte unas divertidas fotos bajo el agua con la cámara de tu móvil.

Seguramente has visto en los perfiles de las redes sociales fotografías que han sido tomadas bajo el agua y te ha entrado el gusanillo por hacerte alguna. Pues nos parece genial que pruebes a hacerlas.
Si no cuentas con una cámara o un teléfono especial para sumergir en el agua, no te preocupes. Existe un accesorio al que puedes recurrir para hacer capturas de imagen bajo el agua. Y aunque los resultados no sean tan profesionales como los que se logran con un equipo especializado, seguro que te bastará para hacerte con unas fotos diferentes.
Una funda sumergible
Para poder hacer fotografías bajo el agua con tu móvil lo primero que tienes que hacer es conseguir una funda sumergible o carcasa estanca, es decir una funda que te permita guardar tu teléfono sin que le entre agua por las juntas. En realidad, por ningún lado. Asegúrate de que la funda sea compatible, al cien por cien, con tu modelo de móvil. En el mercado encontrarás fundas desde 10€.
Para hacer fotos con toda tranquilidad bajo el agua, lo ideal es que previamente hagas pruebas a la funda. Pon una servilleta dentro de la carcasa, ciérrala y métela en un cubo con agua durante unos 45 minutos. Pasado ese tiempo, saca la funda del agua y comprueba que la servilleta sigue completamente seca.
Si es así, ya sabes que tu carcasa es en realidad hermética. Pero así y todo, te recomendamos que hagas una segunda prueba. Ahora mete el móvil dentro de la carcasa y sumérgelo en el cubo con agua. Tienes que prestar atención a que no haya burbujas cuando la funda se vaya hundiendo. Déjalo unos minutos y comprueba que tu teléfono está a salvo. Si al introducir la funda con el móvil empezaran a salir burbujas, sácala de inmediato, pues eso significa que le está entrando agua.
Patos al agua
Hacer fotos bajo el agua requiere paciencia, tanto de quien va a ejercer de fotógrafo como de quiénes van a posar, pues no siempre sale a la primera una foto tan genial como quisiéramos. La recomendación en este caso es que si el teléfono te permite hacer fotos en ráfaga actives este recurso para tener muchas más opciones para elegir.
Quien primero se tiene que sumergir es el fotógrafo para ver el espacio con el que cuenta y hacerse una idea de lo que puede lograr. Luego sale y le da instrucciones al o los modelos acerca del lugar donde deberán sumergirse y de la pose deseada. Nuevamente se vuelve a sumergir el fotógrafo y seguidamente las personas que van a salir en la foto.
Como te podrás imaginar, es necesario tener habilidad para retener el aire un buen tiempo bajo el agua, pero bueno, si no es así no pasa nada. Por eso es que te decíamos que se requiere tener paciencia, pues si hay que zambullirse muchas veces, se hace. Lo importante es dar con la foto que te agrade. También, si necesitas más tiempo para tomar la foto o no eres bueno con lo de la retención de aire, puedes echar mano de un esnórquel .
¡Mucha suerte! Si te animas a convertirte en fotógrafo submarinista, no dudes en compartir tus fotos con nosotros en el correo hola@primerafoto.com. Nos encantará ver los resultados.
Y si quieres conocer acerca de nuestro trabajo profesional, en este enlace te lo contamos todo.